Bajar de peso podría ser un dolor de cabeza ya que la mayoría de personas buscar estar en forma de la manera más práctica y sencilla sin tener que acudir a gimnasios y someterse a estrictas dietas que lo único que hacen es lograr tener más hambre sin lograr algún resultado.
El sobrepeso se ha convertido en una enfermedad que al margen de verse mal frente al espejo, atenta contra la salud y propicia el origen de tener otros males como la diabetes, hipertensión, aumento del colesterol y hasta inclusive llegar a sufrir un infarto cardíaco.
No es tan difícil bajar de peso si se modifica los hábitos alimenticios, esto quiere decir, reducir las calorías sin quitar al cuerpo los nutrientes que necesita. Existen dietas estrictas difíciles de cumplir, del tipo frutas y verduras y las que favorecen un tipo de alimento, las de tipo dieta de grasas, las cuales son perjudiciales para la salud a largo plazo. Se dice entonces, que menos calorías es igual a menos grasa.
Este vídeo te puede interesar para perder peso rápidamente!!!!
Reduciendo un 25% la ingesta de calorías bajar de peso lo lograrías en pocos días ya que tendras una pérdida progresiva de peso, pero toda esta dieta debe estar acompañada de una rutina de ejercicios aeróbicos y así se logrará mantenerse en buen estado.
Para perder kilos de una manera saludable y segura, es necesario aprender a reemplazar lo que comemos de manera correcta para reducir el consumo de calorías. Recuerda que cada vez que consumes alimento graso, aportas a tu organismo 9 calorías por gramos en lugar de 5.5 por gramo, prácticamente casi la mitad, que aportas si consumes carbohidratos o una proteína.
Entonces aquí lo importante es restringir el consumo de grasas, sobretodo las saturadas que son dañinas para el organismo como los lácteos enteros, embutidos, mantequilla, manteca, carnes, chicharrones y mucho más. Es así que sólo el 30% de las calorías que consumimos cada día deben provenir de las grasas.
CONSEJOS PARA BAJAR DE PESO.
Sustituye las papas fritas por papas al horno, la mantequilla por mermelada, la salsa de queso por salsa de verduras, las frituras por alimentos hervidos.
Olvídate de la idea de que los carbohidratos engordan, no es cierto, lo que nos hace subir de peso es el tipo de acompañamiento que le ponemos. Por ejemplo, un pedazo de choclo, papa o yuca iría bien siempre y cuando éstas sean hervidas y no fritas.
Los tallarines iría bien con salsa de verdura o tomate, muy por el contrario si los combinamos con crema de queso o de leche que resultaría altamente calóricos.
Los consumos de productos “Light” o descremados aportan menos grasas y por ende menos calorías.
Los jugos y bebidas calientes deben ser endulzados con edulcorantes, no tomar alcohol que proporciona muchas calorías como las grasas.
Sustituye los quesos mantecosos con gran cantidad de grasas por lo quesos menos maduros como el “cottage” y el fresco.
Ingerir productos integrales en lugar de refinados ya que además de ser buenos en la alimentación, aceleran el tránsito intestina.
En el caso de las frutas, opta en lugar de chirimoya o mango, por papaya, manzana y peras, incluso el plátano con tan sólo 20 calorías más que la manzana que tiene 80. Al final de toda esta rutina, habrá la recompensa de verte y sentirte mejor, sólo mantener la firmeza y continuidad de estos consejos y convertirlos en un hábito en tu vida.
0 comentarios:
Publicar un comentario